Información

A LA DERECHA ENCONTRAREIS LO RELACIONADO CON EL PASTOR AUSTRALIANO

jueves, 15 de junio de 2017

                                                   
                                                           EL CUIDADO Y LA HIGIENE 


Como no siempre es posible vamos a tratar el tema de la piel y el pelo de nuestro aussie por fases, de manera independiente entre si.

 Fase de cachorro:
Cuando adquirimos un cachorro australiano, lo primero que tenemos que saber sobre este punto es que es un perro de doble capa, o sea con dos tipos de pelo. 
La capa exterior es más dura y escurridiza. Es el envoltorio perfecto para la piel.
Esto quiere decir que a la adquisición ya debemos también contar con la necesidad de utilizar varios cepillos. 
En esta fase necesitamos sobre todo un cepillo suave y una mesa que nos facilite el trabajo.
Hay una cosa que es la más importante y que no cuesta dinero. La actitud con que vamos a enseñar al cachorro esta situación y la importancia de que se de cuenta de que va a formar parte de su vida. 
Es una manera de educar al cachorro maravillosa, bien hecho el lo recibirá como vuestro momento personal.
Y tiene una gran grandisima ventaja. Vais a conocer cada recoveco de vuestro perro y enseguida os daréis cuenta de cualquier alteración que pueda requerir la ayuda de un veterinario.
La habituación del cachorro hará que ya en su fase adulta se comporte durante el cepillado de una manera excelente.
Por norma he de decir que el cachorro tiende si lo pasa bien a querer jugar con los cepillos, y si le molesta la manipulación, intentara controlar el proceso mordiéndolos.
Por eso antes que nada:
1- subiremos al cachorro a la mesa en el momento en que ya no desee jugar o comer. 
en ella empezaremos a manipularlo acariciado un costado de  forma suave, como si fuera el propio cepillo recorriendo el costado completo. ( Primero uno, después el otro)
Lo alzaremos con calma para ver el otro costado y repetiremos el proceso.
acto seguido lo premiamos sin hablar con una caricia.
Colocando desde el trasero nuestra mano en su tripa, comenzaremos a pasar la mano por sus faldones de igual forma que lo hicimos con los costados. Lo volveremos a levantar en vilo y lo acariciaremos.
En la mesa en posición de pie, pasamos despacio nuestra mano por cada una de sus patas de arriba a abajo, levantado cada una de sus patas al llegar al extremo. Si en este transcurso, el cachorro nos muerde, pararemos la mano sin quitarla y acariciaremos la barbilla de forma tranquila hasta que nos deje hacerlo.
Por hoy hemos hecho suficiente. 
Ponemos nuestra mano por delante del cachorro a modo de stop, si se está quieto, lo felicitamos, lo bajamos de la mesa y le damos una chuche, alabando el buen trabajo que ha hecho.
2- Comenzamos como en el punto uno, pero esta vez ya teniendo a mano el cepillo suave. Cepillo que le encantará morder porque lo verá como un juguete y por eso no lo subiremos en su momento de máxima actividad.Y al actuar con el cepillo lo hacemos como anteriormente hicimos  con nuestra mano. Añadiendo la fase del pecho. 
Lo colocamos suavemente en posición de sentado, si pasaremos por el pecho despacio, colocado nuestra mano libre en su hocico y levantándolo un poco.
si todas estar fases han ido bien, con suavidad colocamos al perro tumbado de lado y le acariciamos costado y barriga, una vez con la mano y otra más despacio con el cepillo.
Lo ponemos nosotros en posición de pie, ( el no debe levantarse por su cuenta), colocamos nuestra mano en posición de stop. Lo bajamos de la mesa y premiaremos su buen comportamiento..
Repetir el proceso a diario. 
Lo más importante de todo es que podamos notar que el cachorro se encuentra cada vez más adaptado a nuestra manipulación y que incluso lo hace de buen grado.

jueves, 27 de junio de 2013

La comida desde un punto de vista no alimenticio

Últimamente todos nos lanzamos al adiestramiento de nuestro perro, y es algo que me parece fantástico, porque indica una vinculación con el propietario y una implicación real por su parte. Salvo que a veces actuamos sobre nuestra intuición y sin base convertimos en un problema algo que en principio no tenía por qué darse.
Hoy quiero hablar de la alimentación como parte de una obediencia que no entiendo. He visto ya muchos casos en los que el propietario desea retar y hacer valer una obediencia en esos momentos y sé que pueden crear un sentimiento cuando menos tenso en el momento previo a la alimentación. Cuando menos un momento de excitación en lo que a mí me parece, debería ser un momento relajado para el perro.
 Si un perro, o mejor dicho, si un cachorro nos va a dar malos comportamientos como la agresividad por posesión en un futuro. Dará muestras de ello durante el juego de cachorro y es en estos momentos cuando de  podemos redirigir el comportamiento. De esta manera él se da cuenta, de cuanto mejores son otros caminos.
Mientras también hacerle saber que el acercamiento de nuestras manos sólo trae sensaciones positivas, comida o juego cambiará totalmente la percepción que tiene el cachorro de esas manos.
Yo no aconsejo, ponerse a dar órdenes mientras la expectativa de la ración de comida estás en entredicho dependiendo del comportamiento canino. Con suerte podemos tener un perro sumiso, muchas razas lo son, que acepten sin retar nunca esta situación. Pero existen otro tipo de razas, o mejor dicho de caracteres de algunas razas, que se toman esto como un reto que, quizás algún día lleguen a aceptar.
Si ya tenemos un perro adulto, y ya tenemos un problema de comportamiento con la comida y otros objetos que él no quiere ceder. Ya sea esto de una forma agresiva o con meras amenazas. Lo mejor es que nos pongamos en manos de un profesional, no de un adiestrador.
El que ha realizado cursos de adiestramiento y tiene experiencia, sabe como crear comportamientos nuevos y comportamientos  no compatibles con la conducta no deseada. Pero la base del problema se encuentra ya instaurado y se trata de extinguir una conducta en la medida de lo posible,  O en hacer tratos entre guía y perro y sin echar más leña al fuego. No todos los profesionales saben hacer esto y no todos los propietarios están dispuestos a este trabajo algo más complicado.
No olvidemos nunca que, debido a la neotenia un perro jamás será un lobo y por lo tanto nunca nos pondrá en entre dicho nuestro liderazgo a no ser que nos lo busquemos.
Existen perros cabezotas, también los hay fuertes, posesivos, antisociales, híper-sociales, alocados…..

Existen las razas, porque nosotros las hemos creado

SIEMPE ESTARAS EN MI MENTE ASIA

Ficha básica del pastor australiano

  • Altura a la cruz: de 51 a 58 cm en los machos y de 46 a 53 en las hembras
  • Peso: de 25 a 29 kg en los machos y de 18 a 25 kg en las hembras
  • Capa: tricolor negro, tricolor rojo, azul mirlo, rojo mirlo y bicolor en todad sus capas
  • Promedio de vida: unos catorce años
  • Carácter: estable
  • Relación con los niños: buena
  • Relación con otros perros: buena
  • Aptitudes: perro pastor y de compañia
  • Necesidades del espacio: más que de espacio tiene necesidad de ejrcicio
  • Alimentación: unos 400 g. de alimento completo seco
  • Arreglo: cepillados regulares en perros dedicados a la compañia
  • Coste mantenimiento: medio.
  • Es un perrro perteneciente al grupo 1 (perros de pastor) y su alta en la FCI data de 1996

LOS CACHORROS DE MEGHAN

pastor australiano

pastor australiano