Últimamente
todos nos lanzamos al adiestramiento de nuestro perro, y es algo que me parece
fantástico, porque indica una vinculación con el propietario y una implicación
real por su parte. Salvo que a veces actuamos sobre nuestra intuición y sin
base convertimos en un problema algo que en principio no tenía por qué darse.
Hoy
quiero hablar de la alimentación como parte de una obediencia que no entiendo.
He visto ya muchos casos en los que el propietario desea retar y hacer valer
una obediencia en esos momentos y sé que pueden crear un sentimiento cuando
menos tenso en el momento previo a la alimentación. Cuando menos un momento de
excitación en lo que a mí me parece, debería ser un momento relajado para el
perro.
Si un perro, o mejor dicho, si un cachorro nos
va a dar malos comportamientos como la agresividad por posesión en un futuro.
Dará muestras de ello durante el juego de cachorro y es en estos momentos
cuando de podemos redirigir el
comportamiento. De esta manera él se da cuenta, de cuanto mejores son otros
caminos.
Yo no
aconsejo, ponerse a dar órdenes mientras la expectativa de la ración de comida
estás en entredicho dependiendo del comportamiento canino. Con suerte podemos
tener un perro sumiso, muchas razas lo son, que acepten sin retar nunca esta
situación. Pero existen otro tipo de razas, o mejor dicho de caracteres de
algunas razas, que se toman esto como un reto que, quizás algún día lleguen a
aceptar.
Si ya
tenemos un perro adulto, y ya tenemos un problema de comportamiento con la comida
y otros objetos que él no quiere ceder. Ya sea esto de una forma agresiva o con
meras amenazas. Lo mejor es que nos pongamos en manos de un profesional, no de
un adiestrador.
El que
ha realizado cursos de adiestramiento y tiene experiencia, sabe como crear
comportamientos nuevos y comportamientos
no compatibles con la conducta no deseada. Pero la base del problema se
encuentra ya instaurado y se trata de extinguir una conducta en la medida de lo
posible, O en hacer tratos entre guía y
perro y sin echar más leña al fuego. No todos los profesionales saben hacer
esto y no todos los propietarios están dispuestos a este trabajo algo más
complicado.
No
olvidemos nunca que, debido a la neotenia un perro jamás será un lobo y por lo
tanto nunca nos pondrá en entre dicho nuestro liderazgo a no ser que nos lo
busquemos.
Existen
perros cabezotas, también los hay fuertes, posesivos, antisociales, híper-sociales,
alocados…..
Existen
las razas, porque nosotros las hemos creado